FAQ's

PREGUNTAS FRECUENTES DE NUESTROS PACIENTES

Es la pregunta del millón, y lo cierto es que no todo el mundo es apto para hacerse un microtrasplante o injerto capilar. Por ello, necesitaremos realizar un examen médico que confirme que la intervención es viable. La mayor parte de los casos en los que se rechaza un microtrasplante capilar tienen que ver con que la zona donante no tiene la suficiente densidad para poder obtener los resultados adecuados (hablamos generalmente de la zona de la nuca, donde los folículos son por lo general inmunes a la hormona que provoca la calvicie). Es lógico pensar que los llamados «alopécicos universales» (los calvos totales), no podrán optar por esta solución.

 

La técnica más avanzada y recomendable para obtener los mejores resultados en el injerto capilar es la «Follicular Unit Extraction» o FUE. Se trata de una intervención microinvasiva que consiste en algo tan sencillo y a la vez laborioso como es trasladar el cabello de una zona a otra de la cabeza.

En concreto, lo que se extraen son unidades foliculares que pueden contener desde uno hasta cuatro o más pelos para «repoblar» las zonas en las que la calvicie es o comienza a ser evidente. La intervención, que suele durar unas seis horas, se realiza en quirófano y con anestesia local, permitiéndonos hacer vida normal en pocos días.

 

Por supuesto. De hecho, cada vez más mujeres deciden dar el paso para atajar problemas de autoestima e imagen que afectan tanto a su vida privada como profesional. Y es que la técnica de trasplante capilar es la misma, si bien las zonas a tratar suelen variar respecto a los casos masculinos, puesto que las mujeres con alopecia suelen perder el cabello en zonas diferentes. Además, en el caso del injerto femenino se suele evitar rasurar toda la cabeza para que el trastorno estético no sea tan drástico.

 

La intervención en sí no resulta molesta más allá del momento de la aplicación de la anestesia, cuyos efectos son prácticamente inmediatos. Una vez suministrada, el paciente asiste a una intervención de unas seis horas sin molestia alguna. En las horas siguientes al microtrasplante, las posibles molestias en el cuero cabelludo se pueden aliviar con analgésicos y antiinflamatorios, siguiendo la recomendación del especialista.

La intervención se puede realizar durante todo el año. Si vamos a aprovechar las vacaciones de verano para hacerlo, debemos protegernos aún más de los rayos del sol con bloqueador solar o un sombrero, y esperar un tiempo antes del primer baño en la playa o alberca.

 

Raparse la cabeza puede ser un punto sensible para las mujeres. Es cierto que permite a los profesionales trabajar en mejores condiciones y agilizar la intervención, pero se puede únicamente rasurar dos o tres tiras de la zona donante y disimularlas después cubriendo con cabello de arriba.

Tenemos que saber que desde el momento que se realiza el trasplante hasta el cuarto día suelen aparecer pequeñas costras en la zona tratada que requieren unas curaciones con suero fisiológico, pero que habrán desaparecido entre el séptimo y el décimo día. Por lo demás, si nos sometemos a un microinjerto capilar no será necesario guardar reposo absoluto, aunque sí es conveniente que sigamos una serie de recomendaciones posturales, de descanso y de higiene para proteger la zona tratada en los días posteriores al proceso.

Por un lado, a la hora de dormir hay que procurar no rozar la zona del implante con la almohada o la ropa de cama, aunque esto no suele suponer demasiado problema teniendo en cuenta la altura a la que se suele presentar esta área. Además, la zona donante se puede apoyar con tranquilidad, con lo que no debería haber dificultad a la hora del descanso.

Por otra parte, lavarse la cabeza está prohibido durante los primeros tres días tras la intervención, si bien después tendremos que hacerlo con un especial cuidado y siguiendo las indicaciones de los especialistas. En el caso de la clínica Dra. Jetzabel Ortiz, el lavado del 4º día se hace en la clínica con un especialista, que explicará al paciente cómo hacerlo y los cuidados posteriores hasta la siguiente cita.

Nuestra clínica da un servicio post-operatorio con consultas incluidas en el precio en los meses 1, 6, 12 y 18.

En principio, salvo excepciones, pasados alrededor de cuatro días desde la operación podremos incorporarnos a nuestro puesto de trabajo con normalidad. Aunque nosotros recomendamos una semana, porque es el plazo en el que suelen desaparecer las costras.

En cuanto a bañarse, al menos durante el primer mes tendremos que realizar el aclarado con agua poco a poco, con agua en pequeñas dosis, con ayuda de un vaso o un pequeño recipiente. En todo caso tendremos que evitar la regadera directamente, cuya presión podría alterar la buena evolución del microinjerto.

Asimismo, durante los primeros 15 días no es aconsejable la exposición solar de la zona, con lo que será necesario cubrir el área con gorras o sombreros (tanto si es un día soleado o no). A partir de ese plazo podremos exponer la zona del implante al sol solo si aplicamos protección solar.

Igualmente, para retomar actividades cotidianas como ir al gimnasio o andar en moto suele recomendarse esperar entre quince días y un mes, respectivamente, aunque son los profesionales quienes deben valorar cada caso de manera individualizada.

Como hemos hablado más arriba, se obtiene de zonas de la cabeza como la nuca o las sienes que se denominan donantes porque están muy pobladas y en las que no serán visibles los efectos de la extracción. En ocasiones, cuando no es posible aprovechar folículos de la cabeza, se obtienen de otras partes del cuerpo como la zona de la barba, el pecho o los brazos. Pero siempre se recomienda esta posibilidad como última opción, cuando ya no tenemos folículos pilosos disponibles en la zona donante del cuero cabelludo.

Puesto que se extraen las unidades foliculares completas, no es posible que el pelo vuelva a crecer en ese punto preciso. No obstante, la técnica que se utiliza es de gran precisión y hace que no se perciba esta menor densidad en la zona donante.

Aunque es posible, los profesionales recomiendan evitar esta opción ya que existe una alta posibilidad de rechazo del cabello de otro donante y puede obtenerse un resultado poco estético con el trasplante al no tratarse del mismo cabello.

Los resultados definitivos del injerto de pelo pueden comprobarse alrededor de un año después de la intervención en la mayoría de los casos, aunque pasados seis meses ya se pueden comprobar avances positivos.

Sin embargo, cabe destacar que hay un hito en todo este proceso que puede provocar la desesperación del paciente si no está correctamente informado. Y es que entre la cuarta y sexta semana se produce una caída del pelo trasplantado (precisamente por el crecimiento del nuevo).

Aunque el trasplante capilar es la única solución para la reconstrucción y corrección de las áreas afectadas por la alopecia, también podemos recurrir a tratamientos dermatológicos de alta calidad para prevenir y tratar la calvicie.

Por ejemplo, la mesoterapia capilar es un tratamiento de bioestimulación y nutrición capilar consistente en la administración subcutánea de un preparado que activa biológicamente las células de unidades foliculares, promoviendo la producción de cabello de mayor calidad y resistencia. Insparya ha desarrollado una fórmula exclusiva denominada MESOHAir, y se caracteriza principalmente por el gran número de componentes que presenta. Es una técnica que se aplica sin necesidad de anestesia en un número de sesiones adecuadas a las necesidades de cada paciente.

También el tratamiento de Plasma Rico en Plaquetas o PRP tiene efectos positivos en el tratamiento de la alopecia. Es una técnica que aprovecha los factores de crecimiento de las plaquetas para rehabilitar folículos en fase de envejecimiento y permitir que vuelvan a producir pelo con calidad y resistencia. Es, por tanto un tratamiento que proporciona volumen a nuestro cabello.